El acuerdo sobre garantías de seguridad ratificado entre Rusia y Bielorrusia enfatiza “el nivel y la naturaleza excepcionales” de las relaciones bilaterales, según el vicencanciller ruso Yevgueni Ivanov. Mientras, el secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, dejó plantada a la jefa de la diplomacia europea, que había amenazado a la Casa Blanca.
La UE ‘no existe’
El acuerdo sobre garantías de seguridad, ratificado recientemente por la Cámara Alta del Parlamento ruso y firmado el pasado 6 de diciembre por los presidentes de Rusia y Bielorrusia, Vladímir Putin y Alexánder Lukashenko, respectivamente, enfatiza “el nivel y la naturaleza excepcionales” de las relaciones bilaterales.
Así lo afirmó el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Yevgueni Ivanov. Añadió que este tratado tiene un “significado histórico” para garantizar los intereses geopolíticos de Moscú y Minsk.
“En Bielorrusia se han dado cuenta, evidentemente, tras las experiencias recientes que han tenido: no olvidemos que en Bielorrusia hubo un intento de eso que llaman ‘primaveras’ para derrocar al Gobierno legítimo de Lukashenko. Tienen bastante claro, tanto Rusia como Bielorrusia, que la seguridad es un asunto mutuo y que la defensa de ambos países es un eje central y fundamental, nuclear en la relación entre ambos países”, explica el analista internacional Paco Arnau.
Entretanto, la reunión que debían mantener el secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, y la alta representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de
Seguridad, Kaja Kallas, ha sido cancelada. El encuentro bilateral, cuyas imágenes esperaban difundir las agencias de noticias, estaba previsto para este miércoles, pero el portavoz de Kallas declaró que la cita se había cancelado “por problemas de agenda”.
Para el experto, “el problema aquí es que la parte europea, la mayoría de los dirigentes de la Unión Europea —no todos—, viven en un mundo irreal, en un escenario que se han montado, un ‘teatro de guiñoles’ en el cual ellos piensan que todavía siguen teniendo un papel protagonista, y eso ya no es así”.
Previamente, Kallas se había pavoneado con respecto al derecho que cree tener Europa en la mesa de negociaciones del conflicto ucraniano. Al anunciar este lunes su reunión con Rubio, que finalmente no se produjo, Kallas declaró: “He dejado muy claro en que ningún acuerdo sin nosotros, sin Ucrania o sin Europa funcionará en la práctica. Y esto es para EEUU, que también necesita trabajar con nosotros”.
Respecto a esta situación, Arnau afirma que los dirigentes europeos están totalmente enajenados. “Primero, pretendían ganar una guerra contra Rusia en el campo de batalla. Han visto que no ha sido posible. Y ahora, ¿qué se plantean? ¿Un enfrentamiento contra Rusia y contra EEUU a la vez? Están absolutamente fuera de la realidad“, concluye Paco Arnau.
Sputnik 28/02/2025