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El enorme tamaño del mercado de China, su sistema industrial, la certeza en el diseño de políticas de alto nivel y las garantías institucionales, son las claves del gigante asiático para seguir atrayendo inversiones, según analistas chinos consultados por el diario ‘Global Times’
De acuerdo con Xue Yi, profesor de la Escuela de Economía y Comercio Internacional de la Universidad de Negocios y Economía Internacionales (UIBE) y Xu Mengyao, estudiante de doctorado en la Escuela de Economía y Comercio Internacional de la UIBE, China se destaca como una opción predilecta para los inversores extranjeros en un momento en que la recuperación económica mundial sigue siendo lenta y las tensiones geopolíticas se intensifican.
Los autores refieren que, en 2024, las ventas minoristas totales de bienes de consumo en China alcanzaron los 48,8 billones de yuanes (unos 6,79 billones de dólares), lo que representa un aumento del 3,5 % con respecto al año anterior, “lo que refleja el fuerte impulso de la demanda interna”.
Asimismo, indican los académicos en el artículo, la cadena industrial «totalmente integrada» de China continúa atrayendo la industria manufacturera de alta gama.
A decir de los economistas, otro aspecto fundamental en la atracción de inversiones es que la seguridad del mercado chino se basa en «el firme liderazgo del Partido Comunista de China (PCCh) y en sólidas garantías institucionales».
«Este entorno de inversión seguro se deriva de la planificación estratégica del Comité Central del PCCh, basada en la coordinación de la situación nacional e internacional, lo que refleja el compromiso y la responsabilidad de China en la construcción de una economía mundial abierta y la promoción del desarrollo común», señalan Xue y Xu.
De acuerdo con los especialistas, una serie de diseños e innovaciones institucionales de alto nivel han creado un entorno político estable, transparente y predecible para las empresas extranjeras que operan en China.
Los académicos citan, como ejemplo, un plan de acción de la Oficina General del Consejo de Estado para promover de forma constante la apertura de alto nivel y redoblar los esfuerzos para atraer y aprovechar la inversión extranjera.
«El plan no solo eliminó las acciones y medidas contra la competencia leal para servir mejor a las empresas extranjeras y construir un entorno justo y competitivo, sino que también permitió una mayor participación de las instituciones financieras extranjeras en la banca y los seguros», afirmaron.
Por otra parte, opinan los expertos, Pekín continúa impulsando la apertura institucional y transformando los resultados del desarrollo de alta calidad en bienes públicos compartidos con el mundo.
«La China de hoy no es solo la ‘fábrica del mundo’, sino también un centro global de innovación, lo que confirma plenamente el valor estratégico de la convicción de que ‘invertir en China es invertir en el futuro'», subrayan.
Sputnik 20.05.2025
