EL FERVOR PATRIO

MÉXICO, como gran precursor de estos movimientos de independencia, y de una parte importante de los habitantes del territorio, así como de aquellos países en donde viven millones de mexicanos migrantes. Un evento fundamental para la memoria histórica es el 13 de septiembre, cuando celebramos la gesta heroica de los cadetes en el Castillo de Chapultepec, después de que las tropas americanas ya habían vencido al ejército en la batalla de Padierna y en la de Churubusco.

En este mes también se conmemoran los impactos a los habitantes y la infraestructura en la Ciudad de México y otros estados del país, con los macrosismos del 19 y 20 de septiembre de 1985, así como uno similar en el mismo día en 2017. En el primer terremoto, la sociedad demostró ampliamente lo que es el fervor patrio, al haberse organizado en brigadas de rescate con oportunidad, incluso antes de que se hiciera presente el gris presidente De la Madrid.

La culminación de eventos se presenta el 15 con la noche del Grito y el 16 con el desfile militar, actos que encabeza el presidente de la República.
Antes, el desfile era también con la participación de instituciones y organizaciones de la sociedad. En el desfile reciente, solamente participó la Asociación Nacional de Charros, como parte de la sociedad.

Conmemoración para fortalecer la identidad nacional

El Grito de Independencia, que da el presidente de la República, convoca a grandes concentraciones en el Zócalo de la capital del país, así como a los gobernadores y presidentes municipales en las capitales y principales ciudades del territorio nacional.

Esta conmemoración es quizás la que mayor entusiasmo genera -tal vez por encima de un partido de fútbol de una selección ganadora- donde se exaltan los valores históricos, los sentimientos patrios, una identificación nacionalista y el fervor que ratifica nuestra identidad y pertenencia a este gran país.

Se presentan actos con la enorme riqueza y diversidad cultural, gastronómica, étnica y musical de México. Hay fuegos artificiales, gritos, vivas recordando a los héroes y heroínas que nos dieron patria, chiflidos, arengas, grandes acumulaciones de gente, apretones y empujones que la gente resiste con entusiasmo.

Al día siguiente está el gran desfile militar, que también se realiza en las capitales y ciudades de los otros estados, en donde normalmente se presenta el poderío de las fuerzas armadas: el ejército, la fuerza aérea, la marina y la guardia nacional, presenciando el paso de las diferentes armas, vehículos, aviones, helicópteros, drones, equipos modernos con los que cuentan, también una exhibición de los mejores caballos del criadero de Santa Gertrudis, Chihuahua, así como los halcones y águilas amaestrados, símbolos del Colegio Militar, hoy universidad.

El gobierno e intereses económicos de Estados Unidos, en el siglo XIX, primero infiltró colonos en Texas para después declararse república independiente y ante los reclamos de México, reaccionó con una invasión disfrazada de guerra.

Los cárteles también desfilan

Otros desfiles no oficiales, que muestran el poder de armamento, drones, vehículos blindados, equipos y militantes, los realizan con cierta regularidad los grupos del crimen organizado o cárteles que se encuentran en algunas regiones del país. No hay comparación entre el poder que muestran estos grupos con el enorme poderío de las fuerzas armadas, que los superan con mucho.

Y me pregunto ¿por qué se ha permitido la presencia y el incremento de esos cárteles en algunas regiones bien localizadas del país? Tal parece que la inteligencia o sistemas de espionaje que tienen esos grupos de malosos superan a los de las fuerzas armadas.

Con la décima parte del poderío mostrado por las fuerzas armadas en el desfile militar se podría erradicar a esos grupos delincuenciales. Con el uso de los sistemas de seguridad e inteligencia artificial que tienen, podrían hacer operaciones quirúrgicas legales, incluyendo a los cuerpos policiacos, judiciales y empresariales que los protegen y son sus cómplices.

El fervor patrio se debe demostrar, no sólo con las arengas, gritos, fuegos artificiales, música y demás actividades que realizamos esos días, sino que ese fervor patrio se convierta en conocer la historia del país, de los héroes y heroínas que nos dieron patria, recorrer nuestro territorio con mirada crítica, para conocer la infraestructura, los atractivos naturales, facilidades turísticas, tradiciones y ritos de pueblos originarios.

Políticos entreguistas se resisten al cambio

¿Por qué México perdió más de la mitad del territorio original? El gobierno e intereses económicos de Estados Unidos, en el siglo XIX, primero infiltró colonos en Texas para después declararse república independiente y ante los reclamos de México, reaccionó con una invasión disfrazada de guerra; arrebató territorios que ahora son los estados, o parte de ellos, de Arizona, Nuevo México, Colorado, Nevada, Utah, California, y Montana.

Ello fue posible por el abandono y poco interés del gobierno central y el gran poderío militar norteamericano. Mientras estaba la invasión, los políticos conservadores y liberales estaban peleando por los huesos y negándose los gobernadores y grupos conservadores a participar en la defensa del territorio, hasta alegrándose de lo que sucedía.

Algo de lo que ocurre actualmente son los políticos vende patrias, quienes apoyan, ya no con invasión del territorio, sino con la entrega de los recursos naturales y servicios estratégicos a empresas privadas extranjeras, principalmente americanas, españolas, italianas, inglesas, chinas, canadienses, entre otras, así como a presuntas empresas nacionales que acaban siendo socias minoritarias de las extranjeras.

Estas acciones se pueden comprobar con el dominio que ha tenido el Poder Judicial Federal, encabezado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, los partidos de oposición que han defendido a capa y espada a las empresas extranjeras a las que se les entregaron minas, electricidad, petróleo, agua, playas, ferrocarriles, bancos, aeropuertos, puertos marítimos, carreteras y otros bienes y servicios de la nación, protegiéndolas con la Constitución y leyes entreguistas reformadas desde el gobierno de Salinas de Gortari y los gobiernos que le siguieron hasta Peña Nieto y que ahora se resisten como gatos boca arriba para que no se hagan las contrarreformas a esas disposiciones traidoras a la patria.

Patriotismo con diálogo tolerante

Tenemos que exaltar el fervor patrio evitando la violencia, ser más solidarios con el prójimo, participar en las luchas políticas que reiteren la soberanía nacional y la independencia de nuestra patria. No participar en la violencia física, ni la que se da por las redes o medios de comunicación, propagando mentiras, calumnias, verdades a medias y atacando a los adversarios con odio y no con argumentos.

Es importante participar en debates y diálogos con fundamentos, datos e información verídica y con análisis que sean discutibles y discutidos.

Hay que ser tolerantes con las personas con las que intercambiamos mensajes e información. Estamos en un contexto de grandes contrastes políticos y sociales, en donde los medios de comunicación del Estado Mexicano están adormilados, minimizando el gran potencial que tienen con los sistemas de radiodifusión, los que no se han utilizado adecuadamente por falta de presupuesto, de visión y, sobre todo, de liderazgo.

Mientras tanto, los medios de comunicación comerciales están desatados en contra de cualquier cambio oficial que propone el gobierno, el cual además los sigue financiando, en menor medida de la que tenían antes, pero sigue con un financiamiento; es como darle piedras para que lo ataquen. Como les dijo el presidente José López Portillo: “No les pago para que me peguen”.

El futuro que necesitamos

Las redes sociales representan un nuevo poder de comunicación, que también está siendo tomado por los medios comerciales con mayores recursos y más facilidad para propagar mentiras y calumnias contra cualquier cambio positivo, que por supuesto afecta los intereses de los grupos oligarcas.

El fervor patrio debe estar traducido en amor a la patria, con acciones concretas de solidaridad con las demandas de justicia, con conocimiento de la realidad que estamos viviendo y cambiando, identificando el contexto histórico en que se ha desarrollado el país en el que estamos y el futuro que necesitamos forjar. El fervor patrio deberá unir a un México libre, soberano, independiente de cualquier injerencia extranjera y, sobre todo, con justicia.

Autor: Juan José Agustín Reyes Rodríguez Consultor destacado en temas ambientales y de desarrollo en México. Experto en integrar equipos en comunicación a través de medios masivos y digitales.

—000—