El Liderazgo Femenino en Voz Propia: Transformación y Retos en México

Programa del 13 de enero de 2025 – REPETICIÓN: Analiza con #VocesDelPeriodista

Segundo Bloque

En este episodio de Voces del Periodista, Celeste Sáenz de Miera y Francisca Saavedra, exploran el impacto del liderazgo femenino en México a través de la figura de Claudia Sheinbaum, presidenta de la nación. Desde los desafíos enfrentados durante su campaña hasta su papel en la Cuarta Transformación, destaca su capacidad, preparación y sensibilidad únicas. Comparada con líderes globales como Angela Merkel y Golda Meir, Sheinbaum representa una visión renovada de gobernar con firmeza y humanidad. En un entorno político hostil, su figura emerge como símbolo de progreso, inspirando a mujeres y hombres por igual hacia un México más equitativo y transformador.

Celeste Sáenz de Miera:

Gracias, queridos amigos, gracias por seguir con nosotros en Voces del Periodista Radio. En la pluralidad es verbo y el análisis es noticia, aquí con los maestros Juan Bautista, la maestra Francisca Saavedra, Gerardo Castilleja, Guillermo Rocafort. Y bueno, aquí lo más importante es que están ustedes. Gracias a nuestros queridísimos ingenieros, gracias ingeniero, ahí en cabina de Radio Cañón. Gracias, Mauricio Ángeles, maestro querido, extraordinario fotógrafo reconocidísimo, pero además, muy bueno en la cuestión cibernética, y es que nos hace también el favor de compartir con ustedes.

Por supuesto, estamos escuchando al maestro Juan Bautista con una parte.

Ahora, si me permiten, vamos con la maestra Francisca Saavedra para ese apunte de ella, subrayando lo que nos decía el maestro Juan Bautista: de la mano de una mujer, la mano de una presidenta, no la misoginia, sino la suma de la sensibilidad, el manejo que tiene una mujer simplemente al hecho de compartir tanto con los hijos. Es una visión diferente, no es ni más ni menos, es diferente. Pero con nuestra presidenta, pues aquí la maestra Francisca Saavedra nos va a dar su punto de vista, su análisis. Adelante, maestra queridísima.

Y regresamos luego con el maestro Juan Bautista. Adelante.

Francisca Saavedra:

Gracias, Celeste Saavedra.

Amigos, muy buenas tardes. Esta mañana me quedé un poco desconcertada, y no lo digo por las primeras planas de los periódicos que circulan en la Ciudad de México. Destacan en sus portadas el festejo y el acto que realizó ayer la doctora Claudia Sheinbaum, presidenta de México, al informar lo que ha hecho su administración en estos primeros cien días y lo que proyecta la transformación para los siguientes años, como lo ha apuntado el maestro Juan Bautista.

En este caso, mi observancia es en torno a su actuación como presidenta de México, pero tomando en cuenta las críticas y comentarios malintencionados de sus detractores, de sus opositores. En algún comentario anterior ya había referido mi palabra, ya lo había dicho yo, que la inteligencia y la capacidad de transmitir órdenes no tienen género. Es decir, lo hace lo mismo una mujer que un hombre, pues solo se requiere capacidad, preparación y respeto. Durante las campañas para la elección de junio pasado se usaron todo tipo de argucias, malas y negras formas para frenar la candidatura de la presidenta Sheinbaum, y a pesar de ello, consiguió el triunfo de la presidencia de México.

Lo que he encontrado desconcertante es el hecho de que unos cuantos opinadores y columnistas han dejado en claro plenamente que lo que los movió, lo que movió sus pensamientos, sus palabras y sus plumas fue y será el odio enfermizo cargado de discriminación, racismo, clasismo en contra de Andrés Manuel López Obrador, Claudia Sheinbaum, y la transformación de México, que data de hace unos años. Hoy, los diarios destacaron ampliamente la exposición de ayer, y solo esos odiadores destacaron las palabras de la presidenta señalando los cimientos sólidos de la 4T y el hecho de que no se deslinde y deje de reconocer la construcción del movimiento obradorista y la formación de Morena, de la que ella es partícipe de ambos eventos desde sus inicios. Para este fin, la oposición sigue utilizando la descalificación, pensando que algún caudillo es quien administra y gobierna el país desde un cuarto contiguo.

Los escritos y comentarios dejan entrever que la presidenta no tiene personalidad propia y que es una simple marioneta. ¡Qué pesados y qué alejados de la verdad! Siguen pensando que una mujer no puede ser, por sí sola, quien gobierna un país. Esta opinión se nos hace, además de machista, anticuada, muy a pesar de la fuerte presencia de las mujeres en la política mundial desde la segunda mitad del siglo veinte.

No sé si ustedes recuerden a Golda Meir, primera ministra desde finales de los años sesenta, o a Margaret Thatcher, primera ministra, la mujer de hierro, quien administró Gran Bretaña desde finales de los años setenta. También está Angela Merkel, quien desempeñó las funciones de canciller en Alemania por casi dos décadas de este nuevo milenio, sí, de este siglo veintiuno, del año dos mil cinco al dos mil veintiuno. ¿Qué tienen estas mujeres que no podamos admirarle a nuestra presidenta, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo? Es una mujer firme, preparada, organizada, que ha dedicado más de la mitad de su vida a la ciencia y la investigación. No sé si usted tenga conocimiento de que, como parte de un grupo de investigadores, fue merecedora de un premio Nobel, ¿lo sabía usted? Bueno, pues estos estudios, publicaciones y reconocimientos, que otros usan para ufanarse y presumir, ella humildemente los ha puesto al servicio del pueblo de México. Con casi cuarenta años llegó a la vida pública, llegó a la política, invitada por Andrés Manuel López Obrador, cuando era jefe de Gobierno del Distrito Federal. Desde ahí, la presidenta Sheinbaum retomó sus principios, sus ideales, sus deseos de mejorar la vida de México, del país, y sobre todo de los mexicanos. ¿Qué te parece si por ahí empezamos?

Celeste Sáenz de Miera:

Gracias, maestra Francisca Saavedra.

Aquí básicamente lo que vemos con estos personajes que muy bien citas, maestra querida. Bueno, no citas a los personajes, sino sus lecturas llenas de bilis, ¿no? De enojo, de frustración, de envidia, porque no pueden manipular a un gobierno que no se deja chantajear, que no tiene que repartir miles de millones de pesos para que le hagan publicidad disfrazada de análisis político. Verdaderamente, pues es lo que se ve, ¿no? Más que nada, yo ya ni los veo, no los leo. Es importante estar al tanto, como tú lo haces. Yo lo digo como un ejercicio personal de salud, y me refiero a salud informativa. Aunque es importante estar alerta, se da uno cuenta realmente de una circunstancia retrógrada, y muchos de sus análisis luego sí que se reflejan, ¿no? El león piensa que todos son de su condición, y analizan también de acuerdo a cómo antes los caudillos o los personajes económicos les dictaban detrás y nada más cambiaban las caras, pero seguían los mismos mandatos. Aquellos con los que empezó aquella mujer presidenta de hierro, pero vemos la diferencia en esta mujer que depauperó y que inició un porcentaje de crecimiento económico que fue bueno para las empresas, ¿no? Pero que depauperó, y eso fue el arranque de una depauperización a nivel internacional, una visión neoliberal que realmente impactó de manera muy negativa, y aquí es a lo contrario.

Vemos a nuestra presidenta, como tú bien lo dices, maestra, arrancando con una fuerza propia, con una luz propia, con una hermana de ella, una manera de ver la vida desde pequeña, desde su familia, desde cómo ella fue creciendo y, obviamente, en parte importante de su vida imbuida y como compañera también en esta parte de cuando el expresidente Andrés Manuel López Obrador, el muy querido expresidente, fue jefe de Gobierno. Vivió con él todas las vicisitudes que ya conocemos todos los mexicanos y, obviamente, también lo que mencionas, maestra, muy bien es subrayar cómo ella, cuando fue presidenta electa, ya fue caminando junto con el expresidente para no perder tiempo, para conocer que ella ya lo sabía, pero fue de a pie para dar el seguimiento, no parar el ritmo que ha llevado la cuarta transformación ahora en este segundo piso de particularidades con el estilo de la presidenta y con esteroides. Vamos a un corte y regresamos. Gracias.

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