Negociación de la frontera México-EUA – Tratado de Guadalupe Hidalgo
POLÍTICA Y SOCIEDAD
POR JUAN JOSÉ AGUSTÍN REYES RODRÍGUEZ*
Antes de la llegada de los europeos a las tierras desconocidas por ellos, que llamaron América, el territorio de Norte América, desde Costa Rica hasta Alaska, comprendía innumerables organizaciones sociales, desde pequeños grupos nómadas, tribus y “naciones” hasta culturas y civilizaciones con estructuras sociales, económicas, militares y religiosas bien estructuradas.
MÉXICO desde sus orígenes ha estado sujeto a las intervenciones militares de Estados Unidos de América (EUA), desde antes de nacer como país independiente de España, a partir de 1810, que comprendía amplios territorios de la América Mexicana, hoy territorios de México y Estados Unidos.
A raíz de las proféticas y estructuradas palabras de Robert Lansing, las intervenciones armadas del ejército y la armada de EUA dejaron de ser por esta vía, para ir aplicando lo dicho por Lansing, quien renunció a su cargo para incorporarse a la Mexican Petrolean Company como uno más de sus socios.
Como sabemos algunos de los presidentes que asistieron a universidades de EUA, desde De la Madrid hasta Peña (Fox no lo hizo) nos incorporaron al llamado neoliberalismo, con el adoctrinamiento y las órdenes recibidas por los gobiernos demócratas y republicanos del país del norte.
La llamada Expedición Punitiva del ejercito gringo, desde el 14 de marzo de 1916 al 7 de febrero de 1917, para atrapar al gran revolucionario mexicano Pancho Villa, que meses antes había invadido al pueblo de Columbus, por las traiciones que habría sufrido con la compra de armas, no logró su captura y sus integrantes tuvieron que retirarse con una dolorosa derrota.
El TLCAN, firmado el 19 de diciembre de 1992 y entró en vigor el 1° de enero de 1994 mismo que puso a México en condiciones desventajosas en agricultura, ciencia y tecnología, educación y muchos temas más

Previamente, del 21 de abril al 23 de noviembre de 1914, la armada gringa invadió Veracruz con el pretexto de evitar la introducción de armas a las fuerzas contrarias al ejército constitucionalista de Venustiano Carranza, e iniciándose la primera guerra mundial.
Siguiendo con este relato en retrospectiva, vemos los numerosos tratados de EUA con México, cuyos resultados han sido el despojo de más del 55% del territorio original de México Independiente, así como la gran dependencia económica y geopolítica que tenemos.
Ahora, en tiempos modernos estamos con la infiltración de empresas trasnacionales en el comercio, la industria, los servicios, el turismo, infraestructura, minería, petróleo, ferrocarriles, energía eléctrica, agricultura y en prácticamente todos los ámbitos de la economía, la cultura, la política y la sociedad en general, gracias a las acciones de los presidentes del neoliberalismo y a sus grupos políticos de apoyo incondicional.
La finalidad de los tratados entre estos países ha sido el control comercial, industrial, económico, militar y geopolítico de EUA sobre México.
“México es un país extraordinariamente fácil de dominar porque basta con controlar a un sólo hombre, el presidente”…”Tenemos que abandonar la idea de poner en la presidencia mexicana a un ciudadano americano, ya que esto conduciría otra vez a la guerra. La solución necesita de más tiempo; debemos abrirles a los jóvenes mexicanos ambiciosos las puertas de nuestras universidades y hacer el esfuerzo de la educación en el modo de vida americano, en nuestros valores y en el respeto del liderazgo de Estados Unidos. México necesitará administradores competentes y con el tiempo, esos jóvenes llegarán a ocupar cargos importantes y eventualmente se adueñarán de la misma presidencia. Y sin necesidad de que Estados Unidos gaste un centavo o dispare un tiro, harán lo que queramos, y lo harán mejor y más radicalmente que lo que nosotros mismos podríamos haberlo hecho”
NOTA.-Estos textos corresponden a la carta de febrero de 1924 que Robert Lansing, secretario de estado de Woodrow Wilson, presidente de Estados Unidos, le dirigiera a Randolph Hearst, influyente dueño de periódicos, en su campaña publicitaria para poner a un ciudadano americano como presidente de México.(www.memoriapoliticademexico.org).
Tratados comerciales recientes
1.-El más reciente que por cierto está a punto de revisarse y cambiarse, fue el Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, conocido como T-MEC, firmado el 30 de noviembre de 2018 en la cumbre de líderes del G20, celebrado en Argentina. Este tratado resultó de la renegociación del TLCAN.
2.-Tratado de Libre Comercio de América del Norte, conocido como el TLCAN, firmado el 19 de diciembre de 1992 y entró en vigor el 1° de enero de 1994 mismo que puso a México en condiciones desventajosas en agricultura, ciencia y tecnología, educación y muchos temas más. Sí hubo algunos asuntos que aparentemente beneficiaron al país, como es el sonado caso de la industria automotriz, aunque hay que destacar que las mayores empresas de vehículos son de capital extranjero, principalmente de EUA.
Tratados, convenios o acuerdos de control político y territorial (Siglo XIX y XX)
3.-Tratado de aguas entre México y EUA de 1944. Establece como se distribuirán las aguas de los ríos Bravo, Colorado y Tijuana, entre ambos países. Esto es debido a que las cuencas de esos ríos abarcan los dos países. Este acuerdo se firmó el 3 de febrero de 1944 y cuyos preceptos siguen vigentes.
4.- Tratado de Bucareli, entre EUA y México. Su principal objetivo fue que México garantizara los derechos de propiedad sin límite a particulares extranjeros y a todas las compañías petroleras estadounidenses; independientemente de otra serie de condicionantes que perjudicaron a nuestro país. Este tratado, en clara violación del artículo 27 de la Constitución de 1917 con la complicidad de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, fue firmado por Álvaro Obregón quien buscaba el reconocimiento de su gobierno, el 13 de agosto de 1923. Sin embargo, este tratado no fue ratificado por los congresos de ambos países, por lo que se considera inválido, sin embargo, siguió aceptándose inexplicablemente hasta hace dos años.
5.- Tratado McLane – Ocampo. Este tratado es de los más ominosos que el gobierno de EUA trató de imponer a México, a cambio del reconocimiento de Benito Juárez y brindarle apoyo con armas.
En su artículo 1 establece: “Como amplificación del artículo 8 del tratado del 30 de diciembre de 1853, la República Mexicana cede a los Estados Unidos en perpetuidad, y a sus ciudadanos y propiedades, el derecho de vía por el Istmo de Tehuantepec, desde un océano hasta otro por cualquiera clase de camino que exista hoy o existirá en lo adelante, gozando de ello ambas Repúblicas y sus ciudadanos”.
Además, con las mismas condiciones se asignan tres rutas para su libre tránsito, en el Istmo de Tehuantepec de océano a océano; entre la frontera de Tamaulipas, desde el punto más conveniente del río Bravo y Sinaloa; y además entre la frontera de Sonora y el Golfo de California en Sinaloa.
Fue firmado el 14 de diciembre de 1859, en Veracruz, por los ministros plenipotenciarios Robert M. McLane de EUA y Melchor Ocampo de México. No entró en vigor porque el senado estadounidense no lo ratificó. ¡De la que nos salvamos!
6.- Acuerdo de Gadsden o venta de La Mesilla. Acuerdo por el cual México le vendía a EUA 76,845 km2, en parte de los actuales estados de Arizona y Nuevo México por diez millones de PESOS. Además, le daba libre tránsito a EUA para transitar en el territorio nacional y por el Golfo de California.
El presidente de EUA lo firmó el 24 de junio de 1853 y el presidente Antonio López de Santa Anna el 30 de diciembre de 1853. El congreso de EUA lo ratificó, después de hacerle cambios, el 28 de abril de 1854. Lo único aplicable fue la venta física del territorio de La Mesilla.
7.- Tratado Guadalupe – Hidalgo. Este tratado dio fin a la invasión de Estados Unidos y despojó de más del 55% el territorio mexicano. La invasión reconocida fue de 1846 a 1848. Los territorios perdidos fueron lo que hoy son los estados de California, Nevada, Utah, Nuevo México, la mayor parte de Colorado y Arizona, así como parte de Oklahoma, Wyoming y Kansas. Este tratado se firmó el 2 de febrero de 1848. Además, se reconoció a Tejas (Texas) como parte del territorio de EUA.
8.- Tratado de Velasco. Firmado el 14 de mayo de 1836, tras la derrota del ejército mexicano al mando de Santa Anna en San Jacinto (21 de abril de 1836). Este tratado no reconocía la independencia de Tejas, sino solamente la retirada del ejército mexicano al otro lado del Río Grande del Norte (río Bravo). De hecho, se estaba reconociendo a Texas como estado independiente. Como no fue ratificado por el senado de EUA y el de México, no se reconoció como válido.
9.- (Tercer) Tratado de San Ildefonso. 1 de octubre de 1800. “fue un acuerdo secreto firmado entre España y Francia en el transcurso de las guerras napoleónicas. Por este tratado España acordó en principio cambiar su territorio norteamericano de Luisiana por territorios en Toscana. Los términos fueron posteriormente confirmados por el Tratado de Aranjuez de marzo de 1801”. Este territorio sería ocupado por EUA en su proceso de adquisición de territorios por vía de compras simuladas, invasiones y despojos a lo que sería México, después de ser Virreinato y lograr su independencia de España.
México desde sus orígenes ha estado sujeto a las intervenciones militares de Estados Unidos de América (EUA), desde antes de nacer como país independiente de España, a partir de 1810, que comprendía amplios territorios de la América Mexicana
Tratado de Paz, Amistad, Límites y Arreglo Definitivo entre los Estados Unidos Mexicanos y los Estados Unidos de América, también conocido como Tratado de Guadalupe Hidalgo
En esta parte comentaremos con más detalle este tratado. (Principal referencia: Mateos Santillán, J,J. 2010. Los derechos históricos de México sobre el territorio de los Estados Unidos. Ed. Tomo. Además otras fuentes públicas) El crecimiento de EUA como una estrategia política y territorial muy clara de expandir su control sobre las tierras hacia el oeste, las que pertenecían al Virreinato de la Nueva España, que estarían como parte del México Independiente, a partir de 1810. Lo primero que logró el gobierno de EUA, fue “comprar” el territorio de Luisiana, vecino con México. Pusieron en sus miras el estado de Coahuila – Tejas, que fue ocupado, como se infiltra la humedad en las paredes, con colonos americanos esclavistas, autorizados por el gobierno de México. La población de mexicanos era realmente escasa y era ocupada territorialmente por grupos y tribus originarias, que actuaban de manera aislada e independiente, ejerciendo su dominio sobre las tierras que ocupaban por siglos. El Destino Manifiesto o Doctrina Monroe, que era muy clara su ambición de “América para los americanos”, se refería no a los habitantes del continente americano sino a sus propios nacionales que siempre han considerado que América es su país, no el continente. Texas fue la primera meta que tenían a la mano y así empezaron a poblar este territorio, que por cierto estaba en el abandono por el gobierno mexicano, lo que facilitó esta ocupación silenciosa pero muy firme.
El gobierno de Santa Anna, estando en una de sus tantas presidencias, incursionó para poner orden con los colonos texanos, que habían declarado su independencia de México desde 1835 a 1836. El ejército mexicano, después de haber vencido a los invasores en “El Álamo” (localidad cerca de San Antonio), se engolosinó y persiguió al ejército texano hasta posiciones que ya tenía por lo que le infligió un golpe en la batalla de San Jacinto, en donde Santa Anna fue atrapado por el ejército texano. Hay la versión que a Santa Anna le pusieron una trampa con una mujer mulata que lo entretuvo mientras los enemigos lo atraparon.
Al estar encarcelado, a Santa Anna lo obligaron a firmar el Tratado de Velasco el 14 de mayo de 1836 en el que reconocía la independencia de Texas, a cambio de ser liberado. Este tratado no fue ratificado por el senado de EUA ni por el senado de México, por lo que Texas presuntamente seguía siendo territorio de México. El gobierno de EUA incorporó a Texas como parte de la Unión Americana, al ser aprobada esa incorporación por el Congreso de EUA en 1845. El gobierno de México no reconoció esta ratificación de Texas como parte de su territorio, lo que originó conflictos diplomáticos entre ambos países, que fueron pasando a enfrentamientos armados en diversas localidades de la frontera. México le declaró la guerra a EUA por esta situación.
Es importante mencionar que el gobierno de EUA, desde su nacimiento como nación independiente del reino de Inglaterra, tuvo como una estrategia fundamental comenzar a integrar, fortalecer y crecer a su armada, lo que le daba una ventaja fundamental para lograr sus procesos de expansión territorial tanto en el Golfo de MÉXICO, como en el Pacífico, frente a la Alta California y el territorio de Oregón, lo que le funcionó para hacer una pinza naval y militar sobre México.
Lo primero que logró el gobierno de EUA, fue “comprar” el territorio de Luisiana, vecino con México. Pusieron en sus miras el estado de Coahuila – Texas, que fue ocupado
En tanto, el gobierno de México se conformó con tener un ejército más o menos fuerte, pero sin tener el control de los territorios del norte.
Mientras tanto, en este periodo hubo otros movimientos de desintegración del territorio nacional al declararse repúblicas independientes California y Yucatán. Esto seguramente dentro de la estrategia del gobierno de EUA por distraer las fuerzas militares y lograr disminuir el territorio nacional, apoyados como siempre por traidores a México, lo que fue parte esencial de las decisiones tomadas por los gobiernos en turno.
En 1847, cuando prácticamente México estaba bajo el control del ejército norteamericano, el gobernador de la Alta California y el comandante de dicho ejército hicieron un pacto o capitulación en donde se pusieron de acuerdo en el reconocimiento de este territorio como parte de EUA. Estas acciones de convinieron en el Tratado de Cahuenga, conocido también como capitalización de Cahuenga. Fue firmado el 13 de enero de 1847. (www.wikipedia.org).
“El tratado pedía que los habitantes de California renunciaran a su artillería y que se liberara inmediatamente a los prisioneros de ambos lados. A todos los habitantes de California que prometieron no volver a tomar las armas durante la guerra y a obedecer las leyes de los Estados Unidos, se les permitió regresar a sus hogares y ranchos, no fueron obligados a prestar juramentos de lealtad hasta que el tratado de paz fuera firmado entre Estados Unidos y México, se les reconocieron los mismos derechos y privilegios que a todos los ciudadanos de los Estados Unidos y se les dio el privilegio de salir del país si así lo deseaban”
Previamente el 14 de junio de 1846, un grupo de inmigrados americanos declaró a California como una república independiente de México. Sólo duró 26 días. Después de completado el despojo a México, California fue reconocido como estado de la Unión Americana en 1850.
La península de Yucatán declaró su independencia de México el 1 de octubre de 1841 y nuevamente el 1 de enero de 1846. En 1848, Yucatán se reincorporó a México.
Así podemos verificar como el destino de EUA se manifestó contra México a través de viles despojos, invasiones militares, compras simuladas y desafortunadamente en muchos casos con la complicidad de pseudo mexicanos traidores a la patria.
El Tratado Guadalupe Hidalgo, fue firmado con un presidente interino, Peña y Peña, un congreso con una mayoría de traidores y con una oposición de patriotas que fueron minoría y que votaron en contra de ese Tratado. La debilidad del gobierno, la falta de apoyo y solidaridad de varios gobernadores que se negaron a apoyar al ejército contra los invasores, las complicidades, intereses económicos de los sectores conservadores, la burguesía y las divisiones internas de la sociedad, facilitaron el mayor despojo que ha sufrido el país.
Como se vio, este no fue el único tratado que se firmó, sino hubo varios más como se reseñaron, en los que prevaleció la traición de pseudo mexicanos y la prepotencia militar y geopolítica del gobierno norteamericano, independientemente de sus partidos republicano o demócrata, que en el fondo son lo mismo. México en la actualidad no está libre de esas intenciones de EUA, ahora con Trump, que es el representante de toda una estrategia de dominación mundial de ese gobierno y de los que verdaderamente dictan la estrategia global de dominación, contando en todo caso con los pseudo mexicanos vende patrias y traidores que se postran ante el poder de los dueños financieros del mundo.
Actualmente hay un grave peligro de perder una franja del territorio de Sonora con el Proyecto Saguaro, consistente en establecer una enorme planta de gas proveniente de Texas para ser licuado en Puerto Libertad, Sonora, y luego movilizado a Asia en grandes buques, lo que además impactará el hábitat de las ballenas en el Golfo de California; todo ello con capital norteamericano, sin ningún beneficio para nuestro país.
Considero que es fundamental que se refuerce una política de educación escolar dando a conocer la historia profunda de México, desde sus orígenes, sus principios y sus tratados con EUA, exponiendo las verdades que se han disfrazado, con el dicho de que Santa Anna fue el único culpable, que, sin defenderlo, pero vemos que él fue un actor de las circunstancias y las verdades no se enseñan por no molestar a nuestro vecino.
Es recomendable que revisen la literatura en fuentes públicas y visiten el Museo de las Intervenciones en la Ciudad de México.
.
![]() |
Autor:
Juan José Agustín Reyes Rodríguez *Ing. Agr. Especialista en Bosques por la Escuela Nacional de Agricultura, hoy Universidad Autónoma Chapingo; candidato a Doctor en Recursos Naturales por la Universidad de Michigan, EE. UU.; exfuncionario público y asesor en recursos naturales, ambiente y desarrollo.
|
—000—