Última Mañanera de Andrés Manuel López Obrador: Un Ciclo que Cierra con Gratitud y Orgullo
En la mañana del jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador celebró su última conferencia matutina, conocida popularmente como “la mañanera”. Después de casi seis años de llevar a cabo este diálogo diario con la prensa y el pueblo de México, López Obrador cerró con un mensaje lleno de agradecimiento, satisfacción y una mirada optimista hacia el futuro del país. “Ánimo, ánimo”, fueron las palabras con las que inició esta conferencia histórica, marcando el final de un formato de comunicación que redefinió la relación entre el gobierno y la ciudadanía.
Un Legado de Comunicación Transparente
Desde el inicio de su mandato, López Obrador estableció “la mañanera” como un ejercicio de comunicación sin precedentes en la política mexicana. Durante estas conferencias, el presidente ofreció informes diarios, respondió preguntas de periodistas y abordó directamente los temas más relevantes del día. Esta plataforma de diálogo circular permitió una interacción constante entre el gobierno y el pueblo, rompiendo con las formas tradicionales de comunicación política en el país.
En su mensaje final, el presidente expresó su gratitud a los periodistas y medios que participaron a lo largo de su mandato. “Agradecerles mucho por participar en estas conferencias durante casi seis años, este diálogo circular que hoy concluye”, afirmó con un tono de nostalgia, pero también con la satisfacción de haber cumplido su misión de acercar el gobierno a los ciudadanos. López Obrador destacó que este ejercicio continuará bajo la nueva administración de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, quien también se ha comprometido a mantener este formato de comunicación con la ciudadanía.
“Por el Bien de Todos, Primero los Pobres”
Uno de los momentos más emotivos de la conferencia fue cuando López Obrador recordó su principio rector: “Por el bien de todos, primero los pobres”. Con evidente orgullo, el presidente subrayó que este lema no solo fue un eslogan de campaña, sino una realidad que su gobierno logró materializar. “Me siento muy orgulloso, muy contento, que atendimos a todos, escuchamos a todos, respetamos a todos, pero le dimos preferencia a los más necesitados”, afirmó.
El presidente señaló que su administración redujo la pobreza y la desigualdad en el país, a pesar de los desafíos globales, como la pandemia de COVID-19. “Nos levantamos y se logró recuperar el crecimiento económico”, mencionó, destacando que aunque el crecimiento fue limitado, se logró una distribución más equitativa de la riqueza. López Obrador destacó que, gracias a políticas como el aumento de salarios y la lucha contra la corrupción, se mejoraron las condiciones de vida de la mayoría de los mexicanos, lo que consideró un “timbre de orgullo” de su gobierno.
Una Transición Histórica y Humanista
López Obrador también dedicó unas palabras a la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, a quien entregará la banda presidencial en una ceremonia histórica. Describió a Sheinbaum como una “mujer excepcional”, llena de amor y humildad, y expresó su confianza en que su sucesora continuará con la labor de servir al pueblo mexicano. “Es difícil que se encuentre en la historia una transición como la que estamos viviendo”, comentó, refiriéndose al respeto y la armonía con los que se ha llevado a cabo el proceso de cambio de poder.
En un gesto que dejó ver la cercanía entre ambos líderes, López Obrador destacó el trato respetuoso que ha recibido de Sheinbaum, lo que calificó como una muestra de su “gran condición humana”. “Estoy seguro de que le va a ir muy bien, como lo merece nuestro país, y muy bien a nuestro pueblo, con la próxima presidenta”, sentenció con convicción.
Logros de un Gobierno para el Pueblo
A lo largo de su mensaje, López Obrador presentó un balance de los logros de su gobierno, haciendo énfasis en la reducción de la pobreza, el aumento de salarios y la mejora de las condiciones laborales. Mencionó también el crecimiento económico, la creación de empleos y la recuperación de sectores clave como el turismo y la inversión extranjera.
Uno de los logros más significativos mencionados fue la recuperación del peso mexicano, que, bajo su administración, se apreció frente al dólar, algo que no sucedía desde hace más de cinco décadas. También destacó el papel fundamental de las remesas enviadas por los migrantes mexicanos, que alcanzaron cifras récord y se convirtieron en una de las principales fuentes de ingresos para el país.
El presidente recordó con emoción los avances en programas sociales y proyectos de infraestructura que beneficiaron a millones de mexicanos, particularmente a los más desfavorecidos. La implementación de programas como “Sembrando Vida” y “Jóvenes Construyendo el Futuro” fueron pilares en su estrategia para combatir la pobreza y generar empleos en zonas rurales y urbanas.
Un Futuro Prometedor
Al finalizar su intervención, López Obrador reiteró su agradecimiento al pueblo de México por el apoyo que recibió a lo largo de su mandato. “Me voy muy satisfecho por el cariño de muchos mexicanos, mujeres, hombres, cosa que agradezco de todo corazón”, dijo con una sonrisa visible. “Me dediqué a servir al pueblo”, agregó, visiblemente emocionado.
Antes de concluir, el presidente firmó dos reformas constitucionales: la consolidación de la Guardia Nacional bajo la Secretaría de la Defensa Nacional y una reforma para garantizar los derechos de los pueblos indígenas. Ambas, según López Obrador, son un acto de justicia para el “México profundo”, un sector de la población históricamente marginado y que, en su gobierno, fue puesto en el centro de las políticas públicas.
Un Cierre con Esperanza y Agradecimiento
La última mañanera cerró con un aplauso de los presentes y un mensaje de gratitud tanto del presidente como de su vocero, Jesús Ramírez Cuevas, quien también agradeció a los medios y al pueblo por su acompañamiento durante estos años. López Obrador se despidió reiterando su confianza en que México seguirá avanzando bajo la nueva administración, y con la esperanza de que su legado de justicia social y amor por el pueblo perdure.
Con esta conferencia, López Obrador concluye una etapa histórica en la política mexicana, marcada por su cercanía con el pueblo y su lucha por un México más equitativo. Como él mismo lo expresó:
“Me voy contento, me voy satisfecho, pero sobre todo, me voy con el corazón lleno de gratitud”.
Así, termina no solo una mañanera, sino un capítulo en la historia de México que será recordado por la profunda transformación social que inició bajo su liderazgo.
Redacción
Voces del Periodista Club de Periodistas de México A.C. | Por la Libertad de Expresión desde 1952 |
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