Bessent, hasta hace poco un desconocido en el mundo político de Washington, podría conseguir sin mucho esfuerzo el aval para uno de los puestos más poderosos no solo de la economía de este país norteamericano, sino también de las finanzas globales.
Reseñas en medios de prensa advierten que el futuro jefe de la política fiscal y económica de la segunda administración de Donald Trump tendrá, sin dudas, que lograr equilibrar el déficit récord y la deuda pública que son como una espada sobre las finanzas públicas de Estados Unidos.
La víspera, el legislador Marco Rubio ganó el consenso bipartidista en la audiencia de confirmación que decidirá si será el jefe de la diplomacia en el entrante gabinete de Trump.
Rubio compareció este miércoles ante el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta, donde prometió, de ser avalado, implementar la filosofía de “Estados Unidos primero” y que “abrirá nuevos caminos” al poner los intereses del país “por encima de todo”.
“Poner nuestros intereses nacionales fundamentales por encima de todo lo demás no se trata de aislamiento”, afirmó el republicano de Florida, quien, de llegar al cargo, sería el primer latino en ocuparlo.
Según el senador, considerado un halcón de la política exterior, “el orden global de posguerra no sólo está obsoleto” y que justo “esta es un arma que ahora se está usando contra nosotros”.
Además, señaló a China como el adversario “más peligroso” de Estados Unidos y también atacó a Venezuela y Cuba.
Hijo de inmigrantes cubanos y nacido en Miami, Rubio, de 53 años, fue alguna vez un acérrimo crítico de Trump, cuando tuvo aspiraciones presidenciales y se enfrentó al magnate por la nominación republicana en 2016.
Pero aquello es agua pasada. La contienda 2024 mostró un acercamiento entre los exrivales, quienes se convirtieron en aliados cercanos.
Otra de las audiencias más esperadas de la jornada de ayer fue la de Pam Bondi para fiscal general, una responsabilidad que desempeñó a nivel estatal en Florida.
Bondi, que está en el círculo de los leales a Trump, una condición que, como todo indica, ha sido el punto esencial del republicano para conformar su gabinete.
Más de una docena de audiencias tuvieron lugar durante la semana. La más complicada fue la del elegido de Trump para ser su secretario de Defensa, pero el veterano de guerra y expresentador de la cadena Fox Pete Hegseth navegó en un mar de cuestionamientos y no se ahogó.
ro/dfm
Prensa Latina 16.01.2025
